A finales del Siglo XIX, el concepto del american dream y el american way of life comenzaban a gestarse; el esplendor económico de Estados Unidos atraía todas las miradas internacionales y Nueva York se convertía en un imán para los migrantes del mundo, quienes esperaban encontrar mejores condiciones de vida para ellos y sus familias. Como una especie de estrategia mercadotécnica, el país norteamericano presumía su modelo a tal grado que por Europa imaginaban un Nueva York con calles pavimentadas en oro, brotes de billetes en los árboles y fuentes de monedas, pero en realidad –detrás de esa fachada engañosa– había miseria y hambre fuera de las principales calles que concentraban todo el capital de Manhattan.
Como ocurre en cualquier sociedad polarizada, los adinerados ignoraban estas condiciones muchas veces infrahumanas y seguían con su vida repleta de lujos y despilfarros, pero los recién inmigrados que vivían en los alrededores de la ciudad empezaron a codiciar lo que los otros tenían y se armaron en pandillas callejeras y se dedicaron a robar en las zonas donde se concentraba la mayor cantidad de ingresos, en una especie de revolución repleta de aspiraciones, buscando lograr el sueño americano a como diera lugar y formándose un fuerte resentimiento socioeconómico.
Este efecto fue algo que llamó la atención de los periodistas de la época que no tardaron en salir a las calles más peligrosas a retratar los estragos de esta crisis. Se inició la documentación y el periodismo fotográfico (genero que después de algunas décadas se conoció como fotoperiodismo), mostrando la realidad americana tal como era, lejos de máscaras y pretensiones.
Jacob Riis, fotógrafo y reformador social nacido en Dinamarca y emigrado a Estados Unidos en 1870, fue uno de los periodistas que decidió quitarse el miedo y muy movido por su condición de migrante, salió y retrató a una pandilla callejera del Lower East Side en 1888. Después de un tiempo y extensas investigaciones, Riis publicó un libro How the other half lives, quizás el trabajo pionero del fotoperiodismo más relevante, que recibió la reacción del joven Theodore Roosevelt, quien le escribió al fotógrafo: “He leído su libro y vengo a ayudar”. El trabajo de Riis impulsó la reforma a la Ley de Vivienda de Nueva York en 1901, y mejoró las condiciones para los pobres y migrantes que vivían en la gran manzana.